Si pudiera comprimiría el tiempo,
el pasado, el presente y el futuro
fundidos en un único momento,
en un segundo contigo,
y lo mantendría guardado en secreto
para esos días en los que no estás conmigo.
Cuando te eche de menos
buscaré en el cajón de mis recuerdos
y desataré ese momento,
revoloteará la magia y el amor por mi habitación
mientras duermo y me olvido de cada reloj
porque las agujas no giran a cada minuto,
mis manecillas giran con tu voz.
Deambularé en este instante eterno
sólo alimentado por tu respiración
durante eones y siglos, meses y años,
ya que mi tiempo está comprimido,
el flujo de arena se estancó sin tu movimiento
y sólo volveré en mi cuando me digas “ya he vuelto”.